El circulo de parchitas del tercer tipo, se disponen a enfrentar con
su retaguardia el desdén y la apatía y frigidez con que la mujer ¨ sexo débil¨
que de débil no tiene nada; por poseer uñas ponzoñosa y se hacen la fuertes y
duras con semerendo obstá-culo impenetrable para invadirle el triángulo de las bermudas.
Ante tan difícil e incierta
situación de mujeres insensible e incomplaciente, duras de matar, cavernícolas
para caer, terroristas que dinamitan con su indiferencia el sentimiento viril.
Se comporta como guardias nacionales que repelen con gases lacrimógenos del NO,
dispersando así toda manifestación que reclaman su corazón.
Me dicen los que me cuentan que
ante tal ¨vacío de poder en complacer al hombre¨ el círculo del tercer tipo solidarios han renunciado a su
hombría abriendo de par en par su retaguardia conformado por peluqueros,
estilistas, lava cabeza, decoradores, bailarines, enfermeros, arquitectos y gayteros
en general. Estos seres con voz aterciopelada, piel rasurada, mano en codo y
quebrada y con arito están dispuesto a sufrir penalidades con su grito
de guerra Aahyyy. Entendemos pues, porque muchos parecen pero lo son se están
multiplicando como sarpullo.
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