Cuenta la leyenda
urbana en el país, que desde varios disparates de interpretación constitucional
para acá, los Bichitos de la secta del Fetiche del Gran Uh Ah; se han dado a la
tarea de hacer cola, hasta para verle la cara al que ya no está. Así mismo Tía
Betulia después de hacer una fila ó cola kilométrica de racionamiento de
escasez a la cubana para obtener arroz regulado, para que le salieran con el
cuento Uh Ah –“se terminó”-. Bueno, la
cosa es que ella se pregunta como cualquier fallecido, desconectado y
embalsamado desde hace 2 (dos) meses atrás; -¿Cómo es posible el perico
teniendo un hueco debajo del pico pueda comer?.
Y además se siente más
entubada que paciente en cuba. Fíjense dice ella – A mi me late
que el Castrador de la isla de la felicidad tiene a los 2 (dos) Zamuro de la
Cúpula Podría comiendo y bailando en la mano. Yo me arranco un pelo retorcijado
de ahí, pues, sin que me duela, que solo un castrador nos tiene encubado.
Combinando y sometiendo a un pueblo al
racionamiento de escasez de alimento (hambruna socialista), apagones seguido en
diferentes Estados, soborno con el maletín de Antonini Wilson, control de
cambio, devaluación de la moneda, inseguridad y… (Tía Betulia dejó el pelero
antes de concluir ya que le pasaron el dato por un pin prestado, que llegó azúcar
regulada donde los chinos) disculpen esta.
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