Me dicen los que me cuentan que el saludo
es el acercamiento de forma afectiva que socializa a un colectivo. Y esta cosa
del saludo se envía endosado un micro- detector de cómo están las cosas. Eso de
¿Cómo está Uh?, o ¿Cómo le va la cosa?, se ha modificado desde el inicio de
este siglo para acá, ya que se busca saber ¿Cómo le va con la Rapiña? Esto se
ha acentuado desde que el balbuceante ilegítimo Rey Zamuro se le dio la habilitante, siendo esta una
forma dictatorial de proteger a sus corruptos. Esto obedece a una estrategia
ordenada Fidelmente por el Castrador
de libertad al Lacayo Uh Ah.
Recurrimos a una experta en el asunto, Tía
Betulia, mientras hacia unas hayacas decembrinas. Nos causo curiosidad y
sospecha por lo de la escasez provocada por el Control de Cambio instaurado por el régimen Uh Ah. Y nos
preguntamos qué tipo de ingrediente usa y si los sustituyo con desechos
reciclables del bote de la basura, en fin, solo fue una inquietud que no viene
al caso.
Tía
Betulia nos hizo público un documento que la ONG “Raspo la Olla”, mantuvo en
custodia. El saludo entre los Bichitos y demás Deambuladores del país de la
Fantasía Uh Ah, está lleno de incongruencia.
Aquí todos por efecto del Control de Cambio que provoca Escasez de la
Miseria Socialista Uh Ah están inclinados, propensos, casi obligado a ejecutar
actos de rapiña. Ya eso es algo
común responder delictivamente. “…es que si no aprovecho la oportunidad de esta
corrupción Uh Ah, me lleva el Gran Uh Ah”.
Los
saludos no es, en un “estar bien y Ud.”. La cosa de la escasez nos obliga a
exigir un reporte de cómo va el saqueo,
la rapiña y raspar la olla. Como si estuviéramos en los tiempos finales, un conteo regresivo…
en un ya no habrá más oportunidades, el fin del ocaso. Ahí es donde se oye el
clamor “Benditos Mangos!. La cosa de
saludar resulta en saber si nos dan el dato y si quedo uno para mí.
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