Por centuria se ha usado la barba como un decorativo facial y mas allá de eso del porque unos si las tiene y otros no; surgen los lampiños como especie libre de eso despectivamente (BARBA). Para los Científicos se vieron abrumado como una Suegra en el devenir de su edad le sale “BARBA”.
Esa interrogante desconcertó a muchos. Con la
aparición de la Peste China como exterminio manipulador, sobre una parte de la
humanidad, surgió la mascarilla. Esa “mascarilla”,
como elemento preventivo primario; lleva al humanoide al uso desesperado y como
marca discriminatoria y control de las masas.
En el quita y pon de esa mascarilla, se
produce el olvido y pérdida de ese prótesis emergente en tiempo de “Pandemia”.
Ahora es cuando todos quisieran tener “BARBA” y “BIGOTES”, como mascarilla
natural.
Es ahí, la respuesta. El ser humano fue
dotado de esa mascarilla de protección. Como especie de selección natural a la
hora de un exterminio masivo. Solo tiene que amarrarse determinados pelitos y
¡Ñakata!.
Surge otra interrogante aterradora; ¿Porqué?
y ¿Porqué? a las Suegras, le sale “barba”. Es que es esa especie amenazante de
la humanidad como un mal presagio. Las Suegras es un resultado de contaminación
tóxica; que pende entre la familia como un aguijón ponzoñoso a punto de zarpazo
a su víctima agregada. Fin de la cita.
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