Cuenta
la leyenda urbana, que desde una regaladera de patria para acá; en el país de la Fantasía Uh Ah. Le han hecho la
vida más feliz a los Bichitos de la Secta Uh Ah, pero no así al resto de los
deambuladores. Eso de darle patria
no es más que una repartidera de patadas
por detrás, de ahí el término “patria”
y se cree que se lo dan con mentol, para que no sientan los Apagones, Hambruna
Socialista, Expropiaciones, Racionamiento, Cadenas Lava Cerebro Uh Ah. Mientras más los
castigan más felices son. Los Bichitos
(as) poseen y segregan una felicidad estimulada por castigo. Mientras más los
castigan más se comprometen en darle el voto y reelegir a su verdugo.
Este
método expuesto por Tía Betulia, experta en guindar ropa lavada a mano por
falta de electricidad. Admite (Tía Betulia), por lo dicho por la ONG “Me Gusta
Cuando Me Castigan”. Dicen los que me cuentan que es contagioso y sabroso, se
pueden ver una galería de felicidad en las colas de Hambruna Socialista en los
Sumercados. Ya que las tiendas en los Barrios está prohibido vender los
productos de primera necesidad. Nunca un régimen se había ocupado de los pobres,
ya no se siente ignorado. Los pobres son el objeto de manipulación mediática de
la miseria socialista Uh Ah. Todos tienen que ver esas colas de los pobres de la
felicidad. Verla es hacer también la cola, no se sabe que van a vender, la cosa
es la felicidad de hacer la cola de la Hambruna Socialista Uh Ah.
Nota: Los Zamuros de la Cúpula Podría Uh Ah, no hacen la cola de pobres,
ellos usan dólares, helicópteros, caravanas de camionetas blindadas y guardas
espaldas, para entrar de primero.
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