En la encrucijada ante la exitosa pestilencia de exterminio humano por la “Peste China”. En los pasillos de laboratorios científicos de Medicina preventiva, se vieron en la imperiosa necesidad de hacer una vacuna.
El Sindicato de Ratas de Laboratorios “Pinky
y Cerebro”; apeló al pelón y subestimó la presión de participación de una
vacuna. Dicha vacuna debía de estar en el mercado en el curso de un año. Ahí es
donde la Ratas de laboratorio presentaron su renuncia.
Esta situación cuestionó la actuación de las
“Ratas de Laboratorios”. Se alegó que las ratas retardaban los resultados de
las investigaciones, Como ya era tradicional los laboratorios duraban años,
décadas para obtener un producto médico eficaz y confiable.
Porque ahora si sacaron vacunas “bajo
sospecha”, en el ínterin de un año. Eso significa que están usando otro animal ¿y las ratas de laboratorio qué?.
Los científicos hurgaron los anales
del tiempo y llegaron a la presunción etimológica de la palabra “RATA”. Dicha palabra proviene del Latín “Ratus” =
lapso de tiempo rato largo o rato corto.
El uso de ratas es estar sujeto a las pretensiones de su tiempo: rato largo o corto.
Muchos asumen la idea que la falta de financiamiento
y bajo presupuesto de investigación se producía el retardo. Eso evita que usen
una alternativa sin ningún aporte científico, o que la vacuna sea de agua o venga
a ring pela´o, sin garantía. Lo más seguro es que estén usando falsas ratas, a
los contagiados como ratas.
Lo que si estamos seguros es que extrañamos
las “Ratas de Laboratorio”, al menos
producía confianza.
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