Si Ud. por algún designio, castigo o afines
al encuentro cultural de visitar esta región asentada en las riberas de un lago
rodeado de tierra en tiempo de feria. Tiene que enfrentarse al folclórico
habitantes que siendo diezmado por la Peste Socialista Uh Ah, aun quedan
rezagados algunos que persisten en disfrutar una cosa que ellos llaman feria.
Ud. necesita prepararse elásticamente su
cuerpo, para contorsionarlo a las exigencias que amerita: amanecer, deambular
sin propósito, preguntar precios sin interés de comprar. Y sobre todo el cierre
de la feria en una corrida de toros.
Donde el Toro aconseja que dicha
corrida, siempre termina en sangre.
Esto contradice mucho la cosa, un pueblo
sometido a la violencia de horror, terror y persecución por el Narco Régimen Uh
Ah. Al punto se asombrarse por la
sanguinaria forma de arremeter contra los jóvenes y los que se oponen.
Ese mismo pueblo alimenta el deseo de sangre
al asistir con deseo de disfrutar como
ajustician a un indómito Toro hasta
matarlos y desmembrar su rabo y orejas. Con el cuento que es una faena taurina,
y lo hacen por petición del mismo Toro,
que le gusta que lo zaranden así. Sobre todo la puita sobre su lomo, que guinda
y no se cae.
Si Ud. quiere sacarle provecho a su vista,
observe la cultura folclórica del Marabino maracucho; y sepa porque aquí hace
calor. Es porque el sol quiere ver de cerca esa forma original de ser
maracucho.
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