Cuenta la leyenda urbana que el efecto Pandemia –Pestilencia China-, que obligó a la humanidad a un encierro. Eso permitió el ocio mental, anidando pensamientos tóxicos y nocivos para la humanidad.
Los más osados notables del “Frente de Liberación sin Frontera (Púyalo
por Aquí), en su convención anual, celebrado a escondida en la isla que
posee un rio que tiene tres orillas. Aseguran que la vacuna fermentó,
produciendo codicia y pasiones, desembocando en la sumatoria de “Guerras”.
En este terreno abonado emerge la “Bestia que Era y no Es”, una apariencia
de “Negación”. Esta encriptado el
principio de la –afirmación de algo, mientras lo niega con sus actuaciones-,
hasta asumir, que lo bueno es malo y lo malo es bueno.
La Guerra contra el exterminio de la “HUMANIDAD” es entre Humanos. Surgen dos
exterminadores y uno más a saber:
-
Primer
Exterminador: Los que usan tecnología bélica que arrasan
humanos del pequeño hasta el grande, edificaciones animales y afines a un
pueblo, ciudad o Nación.
-
Segundo
Exterminador: Están los otros que le hacen la guerra
de la vida intrauterina, esos que le hacen la Guerra a los humanos indefensos en plena
gestación uterina, con el arma bélica del aborto.
-
Tercer
Exterminador: La Suegra es la resultante tóxica de la
contaminación ambiental en la familia. Para hacerle la guerra a su víctima,
invadiendo su territorio con el viejo truco de: ”Operación Militar Táctica y Estratégica”. Y su clásica arma bélica
de la Suegra, es su escoba y su ceño fruncido con mirada de desdén.